Concordia, 26 de Octubre del 2010
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Iglesia Evangélica Metodista
de Paraná.
“Yo soy la luz del mundo, el que me sigue no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida” Jesús
Gracia y paz sean a vosotros de Dios nuestro Padre y de nuestro Jesucristo, amadas hermanos.
Motiva la presente compartir vuestra alegría por un año más de presencia y testimonio del Evangelio en la ciudad de Paraná, que formalmente diera inicio un 10 de Noviembre de 1887 bajo la conducción de pastor Lino Abeledo.
Innumerables historias de encuentro y conversión debieran ser escritas en esta rica historia, como parte de lo heredado por quienes nos precedieron en la fe, a las que hemos de sumar las de este presente, que testimonian de la obra maravillosa obrada por la Gracia de Dios.
Desde que leyera la historia del viejo caudillo, relatada en el Estandarte Evangélico del año 1889, quedé profundamente conmovido por el mover del Espíritu en la historia de Paraná.
Aquel caudillo que comprara un libro al colpostor con el único interés de ayudarle en lo económico, y que postrado con achaques en cama se dio a la lectura del mismo, iniciando por el libro de Job y prosiguiendo por todos los libros bíblicos. Y que fruto de la lectura fuera reanimado espiritualmente al grado de poder levantarse y andar, para terminar en una conferencia del la iglesia evangélica en donde era explicado el contenido del libro, provocando su conversión tras hablar con el pastor. Este mismo caudillo terminó como ecónomo de la iglesia…
Una de las tantas historias de transformación acontecidas por la gracia de Dios que se manifiesta en las vidas trayendo luz de vida.
Hermanas y hermanos, que en este tiempo de alegría y regocijo por la larga vida de nuestra iglesia allí, este mismo Dios que se manifestara ayer con poder y amor, encuentre una hoy una iglesia que renueva su disposición a ser usada cómo, cuándo y dónde el Señor quiera en favor de nuestros pueblos.
Les abrazo en el amor de nuestro Señor Jesucristo.
Pastor Américo Jara Reyes
Superintendente